Podíamos imaginarnos que la venta de teléfonos por parte de Microsoft no estaba viviendo su mejor momento, pero lo que tampoco esperábamos es que la caída hubiera sido tan… drástica. Según los últimos informes de la firma dirigida por Satya Nadella, la comercialización de sus smartphones ha caído un 54% respecto al año pasado, «reflejando nuestro cambio de estrategia», tal y como se apunta en el comunicado de la compañía. Para que te hagas una mejor idea: el año pasado, por las mismas fechas, hablábamos de 9,3 millones de teléfonos Windows Phone vendidos; hoy la refencia es de 5,8 millones de unidades.
La nueva propuesta de equipos con Windows 10, los Lumia 950 y Lumia 950 XL, se presentaron de hecho este mismo mes y aún ni tan siquiera han llegado al mercado. Anteriormente, el catálogo de Microsoft se ha compuesto de terminales de media y baja gama, lo que podría haber tenido a sus seguidores esperando a novedades y no queriendo invertir hasta conocer la propuesta en la gama alta.
Los productos comerciales de Office, los suscriptores a Office 365, los servicios en la nube y hasta los usuarios activos de Xbox Live han subido, sin embargo, Microsoft tiene una importante tarea por delante para conseguir que su segmento telefónico salga de los actuales números. Veremos si los últimos Lumia son la solución que espera (y necesita).